Las herramientas eléctricas son dispositivos que facilitan la ejecución de trabajos complejos que serían imposibles o muy demorados de realizar con herramientas manuales. Además, permiten a los trabajadores ahorrar tiempo y esfuerzo al enfrentar tareas como cortar, lijar, perforar, pulir, entre otras.
Son muy útiles para mejorar la productividad, ya que les permiten hacer varios trabajos de construcción o reparación de forma rápida, ordenada y sin generar molestias significativas.
El mantenimiento de las herramientas eléctricas es una actividad fundamental para garantizar su buen funcionamiento, seguridad y durabilidad. Están expuestas a factores que pueden deteriorarlas, como el polvo, la humedad, el uso frecuente y los golpes.
Estos factores afectan el rendimiento de las herramientas, causan fallas, averías o accidentes. Por eso, es necesario realizar revisiones periódicas, limpiezas, lubricaciones, ajustes y reparaciones.
Hoy te brindamos algunos consejos, Tips y recomendaciones para así prolongar la vida útil de las herramientas, evitar riesgos para los trabajadores y optimizar la calidad de los trabajos ejecutados.
Principales causas de daños en las herramientas eléctricas
Las herramientas eléctricas pueden sufrir daños por diversas causas, que afectan su funcionamiento y seguridad, provocando daños irreparables, por lo que se recomienda evitarlos.
Las principales causas de daños son:
- Polvo y suciedad: la acumulación de estos en una herramienta puede impedir su correcto funcionamiento. Es importante revisar cepillos y resortes. Estos componentes se encuentran en el extremo del motor eléctrico y permiten el paso de la corriente. Con el paso del tiempo pueden desgastarse y reducir su tamaño.
- Cables de alimentación en mal estado: un cable dañado, torcido, roto o con cortes puede interrumpir el paso de la electricidad al botón de encendido y por ende causar que una herramienta se detenga. Por suerte es una causa que se puede percibir a simple vista.
- Sobrecalentamiento: los motores tienden a generar calor cuando funcionan. Si la herramienta se somete a extensas jornadas de trabajo más allá de las recomendadas por el fabricante o se usan bajo condiciones de fuerza o presión, pueden alcanzar altas temperaturas dañando alguno de sus componentes internos.
Otras causas relacionadas son:
- Uso de accesorios no compatibles.
- Almacenamiento incorrecto, al aire libre, en lugares húmedos o en temperaturas extremas.
- Utilizarlas para un uso que no sea compatible con sus propiedades
- Contacto con sustancias corrosivas, ácidos, sales o líquidos.
- Desgaste natural por uso de cada uno de sus componentes.
- Accidentes relacionados con caídas, golpes o cortocircuitos.
¿Cuáles partes de las herramientas eléctricas demandan mayor mantenimiento?
Las herramientas eléctricas cuentan con múltiples componentes o partes, algunas de ellas son más susceptibles a daños o desgaste que otras. Algunos de estos componentes son:
- Partes móviles: existen herramientas que poseen partes que se mueven como lo puedes ver en sierras y taladros, estas requieren mantenerse lubricadas para funcionar bien.
- Filtros: algunas utilizan filtros los cuales deben mantenerse limpios.
- Bordes de corte: el uso constante de las herramientas hace que pierdan filo, lo que trae un manejo más difícil y riesgoso, deben estar siempre afilados para mayor eficacia y seguridad.
- Cables de alimentación eléctrica: los cables pueden doblarse, desgarrarse o romperse en la medida que se emplean las herramientas, debes mantenerlos en buen estado.
Nuestros consejos de mantenimiento para herramientas eléctricas
Son varios los aspectos que debes considerar para hacer un buen mantenimiento de tus herramientas eléctricas.
Ten en cuenta el material con el que está hecha la herramienta, la forma en que las guardas antes y después de usarlas y los trabajos para los que las usas.
Sigue estos consejos útiles para mantener tus herramientas eléctricas en óptimas condiciones:
- Examina antes de usar: al trabajar con equipos a corriente es vital que antes de cada uso se realice una inspección para determinar un posible deterioro del equipo. Comprueba el estado de los cables de corriente: no deben tener grietas, rasgaduras ni dobleces, evita choques eléctricos e incluso un incendio.
- Retira llaves y herramientas de ajuste: luego de examinar el equipo y al disponerte a trabajar nunca olvides verificar que las llaves o herramientas de ajuste no se encuentren puestas en el equipo. Puedes evitar heridas al usuario o daños al equipo con este sencillo consejo.
- Utiliza los accesorios correctos: evita perjudicar tu herramienta y disminuye el riesgo de accidentes usando los accesorios y partes adecuados.
- Apaga, desconecta o retira la batería: En primer lugar, para cuidar y mantener en buen estado tus herramientas eléctricas, es esencial que las apagues siempre que no las uses, desconéctalas de la corriente y retira las baterías, aun si son inalámbricos, la clave de este consejo es evitar cortocircuitos o cualquier otro tipo de inconvenientes.
- Evita la corrosión: un enemigo silencioso de las herramientas eléctricas. En vista de que están elaboradas en acero y otros metales, son propensas a la corrosión por el óxido. Debes saber que es primordial contar con un ambiente seco y limpio para su almacenaje. Por lo general se recomienda el uso de bolsas con sílice, ya que ayudan a la absorción de la humedad.
Otra opción que tienes para prevenir, evitar o reducir la corrosión es desmontar los componentes y proceder con la aplicación de lubricantes y otros productos específicos para eliminar restos de humedad y polvo.
- Limpia después de usar: es esencial para el buen cuidado. Al terminar el trabajo límpiala con un paño seco, de esta forma eliminas cualquier tipo de residuos.
- Lubrica: desarma todas las partes móviles y limpia usando aceite lubricante. Para las herramientas que tienen motores como la sierra y los taladros, en general se aconseja usar un aceite lubricante especial para motores eléctricos, ya que estos resisten altas temperaturas y protegen los componentes del desgaste.
La lubricación se debe hacer con regularidad, según el uso que le des a la herramienta. Si es a menudo, te aconsejamos lubricarla una vez al mes, en caso contrario, puedes lubricarla cada tres meses.
- Mantén los bordes de corte afilados: una herramienta afilada de forma correcta asegura eficacia y seguridad en su uso. Aquellas que se encuentran sin filo pueden ser difíciles de manejar.
El afilado consiste en desgastar de forma progresiva el acero con una piedra abrasiva, mientras consigas un acero más pulido y con menos imperfecciones en su filo mejor cortará.
- Atiende la carga de la batería: este es un componente esencial y sensible que influye de forma directa en el funcionamiento y la durabilidad de la herramienta, debes mantenerla siempre con carga.
Si alguna de tus herramientas tiene poco uso y emplea batería de litio, el consejo es cargarla cada seis meses y almacenarla en un lugar seco.
Tip adicional: si por el contrario, tu herramienta demanda un mayor uso, el consejo es tener al menos tres baterías cargadas para evitar el uso de cargadores rápidos, los cuales aparentan ser eficientes, sin embargo, sobrecalientan y reducen su rendimiento.
- Elabora un plan de mantenimiento: elabora y cumple un programa de mantenimiento que se adapte a las recomendaciones del fabricante para asegurar el buen funcionamiento, esto incluye formar o capacitar al personal para el adecuado manejo.
Como consejo adicional, las herramientas de corte merecen especial atención a nivel de sus hojas o dientes, cúbrenos con fundas o gomas especiales, de forma que evites la aparición de grietas o fracturas.
Se recomienda mantener un patrón de afilado regular aunque no esté en uso la herramienta, así evitas quiebres cuando llegue el momento de trabajar.
El mantenimiento de las herramientas eléctricas es una tarea importante que nos permite alargar su vida útil, mejorar su rendimiento y evitar accidentes. Sigue esta serie de consejos básicos que acabamos de ofrecerte, como limpiarlas, lubricarlas, revisarlas y guardarlas adecuadamente. No menos importante es manejarlas con precaución y respetando las normas de seguridad. Así, podremos disfrutar de nuestras herramientas eléctricas por mucho tiempo y realizar nuestros proyectos con éxito.